Si se espera que un caballo de polo tenga un buen desempeño, es importante prestar atención a sus cascos. Para mejorar su desempeño y evitar un desgaste excesivo de los cascos de un caballo, es necesario colocarles herraduras. Esta actividad es denominada herrar, y es realizada por el herrador.
La tarea típica de un herrador consiste en retirar la vieja herradura usando una herramienta llamada “extractor de herradura”, que es similar a una pinza. El siguiente paso implica el recorte de la pared del casco a la longitud adecuada con una pinza llamada “alicates”, y limpiando y recortando la suela y la hendidura de la pezuña con un cuchillo de gancho. Después de esto, las herraduras son dobladas en la forma correcta de cada pezuña mediante el uso de un martillo y un yunque.
Después de este proceso, el herrador clava la herradora en la pared del casco, corta las puntas afiladas de los clavos y dobla el resto para que estén casi al ras de la pared del casco. Por último, elimina los bordes de los clavos utilizando una lima grande para suavizar el borde. A veces, el herrador también agrega una almohadilla (un dispositivo de protección hecha de metal, cuero o plástico) entre la herradura y el pie. Un caballo debe ser revisado por un herrador cada cuatro semanas.
